Chimbote en Línea (Anticorrupción - Andina.) El exprocurador anticorrupción, Julio Arbizu, consideró hoy que las acciones y hechos presuntamente ilícitos ocurridos en la región Áncash, tiene el mismo modelo y lógica sistemática de lo sucedido en la década de los noventa con la dupla Alberto Fujimori y Vladimiro Montesinos.

En declaraciones a Radio Nacional, explicó que lo de Áncash evidencia una organización criminal que si bien no es de la misma magnitud del pasado, es similar porque esta enquistada en diferentes instancias.

"Si bien no han copado todas las instituciones como en su momento ocurrió con Montesinos y Fujimori, el modelo es el mismo pues hay una lógica sistémica detrás de la actuación de estas organizaciones. Tienden al uso del Poder Judicial y el Ministerio Público, así como de diversas instancias que serán útiles", señaló.

Dijo que la utilización de organismos judiciales, explican la ausencia de efectividad -"no se sabe si de voluntad"- al momento de combatir a estas organizaciones".

"¿Cómo se combate a una organización como esta?, instaurando un sistema anticorrupción que no existe en el país. Si creemos que organizaciones como la procuraduría, Contraloría o la Unidad de Inteligencia Financiera son la panacea, no nos llevara a un resultado esperado", opinó.

Arbizu precisó que en primer lugar se requiere constituir sistemas articulados que luchen contra las organizaciones criminales y tener la voluntad política para poner a las mejores personas frente a estas instituciones.

"Ha habido, por lo menos en cuanto a procuraduría, un reverdecer en la intención de enfrentar el problema de la corrupción, pero la procuraduría no es una institución que pueda enfrentar solitariamente el tema", indicó.

En ese sentido, comentó que se necesita de un sistema integrado por los operadores judiciales, el Ministerio Público, Contraloría General de la República, Poder Judicial que no existe, "pues no hay una lógica de interoperabilidad ni comunicación entre instituciones".

Añadió que buena parte de las imputaciones al gobierno regional de Áncash que preside César Álvarez, tienen que ver con fiscales que no cumplieron con su labor. El Ministerio Público, dijo, "no dio la pelea que debió dar".

"Hay una deuda enorme que tendrá que saldar el nuevo fiscal (Carlos Ramos), debe desmentir a quienes piensan que no tuvo una buena participación en el caso de Áncash; esperamos que se aparte de estas especulaciones y haga un gran trabajo", sostuvo.