Pequeños agricultores no se beneficiarán con el esperado proyecto
Chimbotenlinea.com (Centro Informaciones-CECOPROS) .- Hoy celebramos el Día del Campesino; y pensando en el campesino recordamos aquel día de mayo, en que montado en una gran tarima erigida a un costado de la Plaza de Armas de Chimbote, en medio de una mañana de intenso sol y de polos y globos amarillos, el propio presidente Ollanta Humala anunció eso que varias generaciones de chimbotanos esperaban escuchar hace varias décadas: “Chinecas sí va”. Entonces todo fue alegría.
(Fotos Archivo)
El regocijo, sin embargo, no duró mucho. Aunque el presidente repitió eso que Álvarez y Valdez decían desde Lima en la víspera: que Chinecas costaría 1.400 millones de soles, serviría para irrigar 33 mil hectáreas de desierto y beneficiaría a 90 mil pobladores, todas esas cifras se fueron desinflando cuando los analistas empezaron a decir otras cosas que no se dijeron. Por ejemplo que los pequeños agricultores no serían los beneficiados con este sueño sino –una vez más– solo los grandes capitales.
El decano del Colegio de Economistas de Chimbote, Luis Luna Villarreal, ha sido el principal crítico del triunfalismo del presidente regional y ha calculado cuánto le costaría a cualquier cristiano intentar adquirir un pedazo de tierra en Chinecas proyecto que se calcula empezará a ejecutarse entre el 2013 y 2014.
“Chinecas no va a ser para los pequeños agricultores. Si revisas la ficha del proyecto en el SNIP (Sistema Nacional de Inversión Pública) verás que se venderán módulos de 200 a 500 hectáreas y de 500 a 1000 hectáreas; esos terrenos tienen un costo promedio de un millón de dólares. Me pregunto: ¿quién tiene un millón de dólares a parte de Jack Castillo?”, interroga con ironía el economista.
Y acota: “Eso es solo para tener el terreno, porque para hacer el canal que conecta el canal madre con tu propiedad, instalar el riego goteo por goteo y la preparación del terreno, es otro gasto y estamos hablando de más de 2 millones de dólares en total. Chinecas no va a beneficiar a ningún pequeño agricultor, ellos solo serán empleados como mano de obra de grandes empresas”.
El economista añadió que esta marginación podría cambiarse si es que el Gobierno Regional de Áncash así lo quiere. “Todo es posible si se tiene la voluntad para hacerlo”, afirmó.