Chimbote en Línea.- (Periodismo Escolar).- A todos nos enseñaron, que el ciclo de la vida implica un orden, tal como: nacer, crecer, reproducir y morir. Lo cual aprendemos desde muy temprana edad. Pero ¿se sigue cumpliendo ese orden? Estudios demuestran que el 50% de muertes adolescentes se deben al consumo de drogas.

Una preocupante realidad y sí, se teme que este porcentaje siga aumentando, ya que arrastrará con ello, la disminución de población humana a nivel mundial, ya que todos estos jóvenes, saltaron de la etapa “crecer” a “morir”, evitando la reproducción.

Pero vayamos al origen.  Si queremos lograr un cambio, debemos hacerlo revisando los antecedentes.  Datos comprueban que el adolescente es más vulnerable al “síndrome de abstinencia”, ya que su personalidad no está aún definida, y fácilmente influenciado puede caer en “dependencia a drogas”.  Pero para que un adolescente sea influenciado fácilmente, debe poseer predisposición genética, problemas familiares y/o trastornos psicológicos; los cuales porcentualmente van en aumento.  Así que, de primer plano, no toda la culpa la tienen los jóvenes; en otras palabras, la drogadicción juvenil es un problema social que va a nacer desde la formación de la moral.

Legales o no legales, accesibles o no, drogas hay y no desaparecerán.  Somos nosotros quienes hacemos el cambio.  Las drogas no son más que un atajo a la perdición de una vida, de un grupo, de una sociedad.

Alumna: Antonella Campos Mondéjar            

 I.E.P.P. MUNDO MEJOR                                                                                                                                             

Grado:4to   de secundaria

Profesor asesor : Juan Miguel Paredes Arana