Chimbote en Línea.- (Por: Econ. Yuri Vivar Miranda) “El panorama es sombrío. Las estimaciones científicas muestran que desde 1900 ha desaparecido el 64% de los humedales del planeta. La pérdida es aún mayor en algunas regiones, sobre todo en Asia. Aunque los humedales continentales están desapareciendo a un ritmo mayor que los humedales costeros, la tendencia general está clara.”  Así resume su ficha informativa la Convención sobre los humedales (  http://www.ramsar.org/sites/default/files)

Pero los humedales no solo están desapareciendo los que quedan se están degradando permanentemente, ¡¡ lo estamos degradando!! Sin entender siquiera que los humedales proporcionan múltiples beneficios, como filtrar el agua, garantizar la biodiversidad, proteger nuestras costas, mitigar el cambio climático, generar turismo, generar ingresos.

Perú es uno de los países con mayor diversidad ecológica en el mundo, dotado de un extenso y variado territorio con una enorme cantidad de recursos naturales. Sin embargo, los recursos naturales no han sido usados para desarrollar una economía resistente y variada. En lugar de eso, a través de su historia, ha habido un patrón según el cual un determinado recurso desencadena un auge económico que es rápidamente seguido por la reducción de los recursos y el colapso (Castro 2005-  Resumen Ejecutivo del Banco Mundial Análisis Ambiental del Perú: Retos para un desarrollo sostenible)

Más de 120 Mandatarios de todo el orbe, en el año 1992 en la Cumbre del ambiente celebrado en Rio de Janeiro Brasil, se comprometieron a cumplir 32 acuerdos en defensa del medio ambiente, han pasado 25 años y se siguen discutiendo y firmando compromisos como el  celebrado en nuestra capital o el último en Paris que sin embargo no han frenado la permanente destrucción de nuestra naturaleza y por tanto de la vida en el planeta.

Los humedales a menudo se consideran como terrenos baldíos, es decir, zonas que hay que rellenar, drenar, quemar, votaderos o convertir a otros usos y eso es lo que está pasando específicamente en Chimbote y Nuevo Chimbote;  años consecutivos vengo escribiendo sobre cómo no solo se van degradando los humedales de Villa María , sino como inescrupulosamente se están haciendo desaparecer  ya sea a través de la desidia de la autoridad o el ilegal relleno de personas que solo buscan su personalísima rentabilidad.

El extinto ex ministro del ambiente y Ecólogo, Antonio Brack  en su prólogo del Diagnóstico de los Humedales de Villa María, elaborado por el Biólogo Chimbotano, Rómulo Loayza, sostiene que “Las imágenes de la evolución del humedal durante los últimos 60 años y su reducción y alteración por el crecimiento explosivo de la ciudad de Chimbote son por demás elocuentes, y nos indican lo mucho que hemos perdido y lo poco que lograremos conservar de el para las generaciones futuras de los peruanos”, sin duda que con exquisito conocimiento y tamaña experiencia don Antonio no podía hacer mejor predicción, hace solo 7 años cuando publique el primer artículo sobre este tema, escribía “ hoy por hoy la única lagunilla que queda y que  se encuentra al extremo de la Av. Pardo languidece al igual que los patillos, los peces y alguna otra ave que perdiendo el rumbo todavía osa posarse en una reserva que pronto será deposito o taller” , esta laguna tenía un espejo de agua de aproximadamente una hectárea hoy no queda nada.

El 2002 cuando Brack prologa el libro en mención, se admiraba que en un área tan reducida lograran aun coexistir tantas especies de plantas y de animales. Se enumeran 186 especies de plantas, una de anfibio, 11 de peces, 129 de invertebrados y 94 de aves, lo que nos indica que se trata de un humedal importante para la conservación de la biodiversidad en la costa peruana, ¿cuantos quedan de todos ellos? , no tenemos la cifra pero es fácil imaginar habiéndose destruido casi todo su   hábitat.

Resolver la problemática  del humedal de “Villa María” sostiene Rómulo Loayza, en el marco de la mega tendencia ambientalista, indiscutiblemente requerirá de la participación de todos los ciudadanos, inversionistas, políticos y obviamente autoridades.

Hasta cierto punto romántico e iluso  Rómulo como Yo, por sencillas razones: ¿Qué hacen los ciudadanos? Arrojan toneladas de basura, ¿Qué hacen los Inversionistas? Rellenan los humedales y destruyen los Pinos, ¿Qué hacen los políticos? Hacen su marketing con el fondo de lo que fue los humedales y de ellos no dicen nada y ¿Qué hacen las autoridades? Poco o casi nada, la mayoría de las veces por el contrario burocratizan los procesos.

El 23 de Setiembre se celebra el día de la primavera y Trujillo hace de ello festivales y obtienen las arcas locales y empresarios pingues ganancias y atraen miles de turistas. El 2 de Febrero se celebra el día de los Humedales, cuanto representa de ingresos para nuestras comunas y empresarios?, simplemente nada.

Son días de propuestas electorales , empecemos por cosas sencillas y de bajo costo, el gobierno del ex presidente Toledo a través de a Trabajar urbano y la Municipalidad provincial construyeron infraestructura a orillas del rio Lacramarca entre Pardo y Meiggs que costo según cifras oficiosas alrededor de Un millón doscientos mil soles, basta con retirar el lodo al centro de la laguna semi artificial , limpiar la maleza , adecuar un ingreso y drenaje del rio Lacramarca  y habremos recuperado algo de los humedales y entregado a la población un lugar de regocijo y relajación.

La actual gestión municipal viene trabajando micro proyectos en la zona del parque metropolitano bien por ello, sin embargo  con tremenda área creo que se necesita de un proyecto más ambicioso que contemple las cerca de 2,000 Ha. como por ejemplo vincularlo al mega proyecto Isla Blanca que optimistamente creo se ha dado inicio con el asfaltado al Cerro de la Juventud y al que no hay que perderlo de vista.

La convención sobre los humedales sostiene que se puede ayudar a frenar, detener e invertir la tendencia de varias maneras: Desarrollando políticas en las que se tengan en cuenta los servicios de los ecosistemas que prestan los humedales e integrándolas en la planificación del uso del suelo. Utilizando todos los humedales que quedan de manera racional, satisfaciendo las necesidades humanas y manteniendo al mismo tiempo la biodiversidad y otros servicios de los humedales. Restaurando los humedales que ya se han degradado. Desarrollando fuentes de financiación para la conservación de los humedales. Educando a los demás sobre los beneficios de los humedales.

Desburocraticemos, modernicemos, transparentemos  y simplifiquemos los trámites en las instituciones públicas competentes para aquellos que pretenden hacer inversión responsable, que genere turismo, valor agregado y  contribuya a la recuperación de nuestros humedales.

Si no hay un plan para la recuperación de los humedales en nuestra provincia, salvo el de recoger basura y luego un cansado discurso,  sugiero las ideas centrales aquí descritas.