Chimbote en Línea.- Milagros Asián Barahona, prófuga esposa del encarcelado ex presidente regional, Cesar Álvarez Aguilar, habría obtenido un departamento en una zona acomodada, ubicada en la calle Los Pinos (Miraflores), frente a la tienda Ripley.

Así lo dio a conocer el colaborador eficaz identificado con el N° 006, quien contó a la Fiscalía Supraprovincial Anticorrupción, que luego de la captura del mandatario regional y ella con orden de prisión preventiva por 18 meses, la pudo ver justo en la entrada del departamento, donde le dio 200 nuevos soles para que se regrese a Chimbote.

El colaborador dijo que conoció el lugar gracias a una persona muy allegada a Milagros Asián de nombre Yeni Arana, a la que su entorno la conocía como muñeca. Según su atestado el pasado 27 de mayo cuando el presidente regional César Álvarez estaba detenido en la Dirincri-Lima, la prófuga esposa llamó a Anabel Tarazona Hervías para pedirle que viaje a la capital, Álvarez Aguilar quería unos vídeos, siendo este el motivo por el que él la acompañó.

Estando en Lima, Milagros Asián le pidió a Anabel que vaya a las afueras de la Dirincri y fue su hermana Lourdes Asián y el hijo de su otra hermana Ruth los que le fueron a recoger a dos cuadras de la entidad mencionada, luego los a un restaurante donde los esperaba Milagros Asián, su cuñado Agustín Álvarez y el abogado del ex mandatario regional.

"La señora Milagros nos dijo que estaba mortificada, porque no le contestaba el teléfono ningún gerente y quería que Anabel entré a la Dirincri, porque César Álvarez quería pedirle unos vídeos, a lo que Anabel se negó y por eso nos pagó el almuerzo y se fue”, señala el colaborador.

Dijo que luego de ello, se fueron junto a Anabel a la casa de su hermano y ahí se enteraron que el juez Richard Concepción Carhuancho había formulado el pedido de detención para 50 implicados en el caso La Centralita.

“Anabel llamó a "muñeca" y ésta le dio una dirección en la calle Los Pinos en Miraflores para ir a ver a la señora Milagros Asián, que vivía en un departamento frente a la tienda Ripley, atrás del parque Kennedy, pero no pudimos ingresar porque la señora Milagros no nos dejó pasar y nos pusimos a conversar afuera. En ese momento Anabel le dijo que todos los de Ilios Producciones estaban imputados y ella respondió: "Está bien ustedes porque han trabajado allí, pero yo...", precisó.

Fue en ese entonces, explica el colaborador, que comenzó a llamar a sus abogados y luego se puso a llorar. “Nosotros le pedimos para nuestros pasajes y nos dio la suma de 200 nuevos soles y nos dijo que ella ya no tenía más. Después de ese día ya no la he vuelto a ver" agrega el colaborador eficaz en su alocución.

(Redacción Central)