“De concretarse, debilitaría el sector y se perderían miles de empleos en todo el país”, precisó.

Refirió que la pérdida de empleos será en Lima así como en el resto del país.

 

Explicó que al tener menos ingresos, las exportadoras pequeñas, principalmente, reducirán el número de puestos de trabajo por pérdida de competitividad.

Dijo que de repente para algunas empresas, la utilidad es solo el drawback por lo que reducirán personal, por tanto, habrá menos oferta exportable.

 

“Hay muchas empresas, especialmente las pequeñas, que para compensar la falta de eficiencia de la economía, solicitan la devolución de los aranceles que pagaron al Estado por importar insumos para producir (drawback). Actualmente es de 3%, pero se conoce que podría reducirse a 0.5%”, precisó.

Ingresos. Un menor volumen de exportación, indicó Julio Pérez Alván, el país tendrá menos ingresos. “Devolver el drawback es una inversión de 3% del Estado en un gran segmento exportador, que podría verse obligado a cerrar puestos de trabajo, disminuirán las exportaciones y el país dejará de tener mayores ingresos”, comentó.

 

Además, señaló el empresario, los exportadores peruanos tienen una gran desventaja frente a sus similares de la región porque enfrentan la falta de una infraestructura adecuada, por tanto, una logística más cara.

Dijo que preocupa a ADEX que con la inauguración del puerto de Chancay se complique el transporte en la zona norte porque no tiene aún vías adecuadas.

 

“Si a ello se suma una disminución de la tasa del drawback, se le restará aún más su competitividad”, manifestó. (Fuente: diario Correo)