Chimbote en Línea (Política) El Comercio. Al cuestionado congresista Heriberto Benítez (Solidaridad Nacional) parece que no le entran balas. Ni siquiera porque fue denunciado ayer ante la Comisión de Ética por sus nexos con su amigo y líder, el presidente regional de Áncash, César Álvarez, investigado por presuntos actos de corrupción y supuestos vínculos con el crimen organizado.

En diálogo con El Comercio, Benítez calificó de “ridícula” y “absurda” la denuncia que presentó su colega Modesto Julca (Perú Posible), para que sea suspendido 120 días por obstaculizar las indagaciones abiertas en el Congreso y en la fiscalía contra Álvarez. “Ya me acusaron antes por eso y el proceso fue archivado”, dijo, como para restarle importancia a la acusación.

“Presentar reconsideraciones o actuar conforme al Reglamento del Congreso no es una falta ética”, añadió, para luego reiterar que en la intervención fiscal al local denominado ‘La Centralita’, en Chimbote (donde presuntamente funcionaba un sistema de escuchas ilegales), él fue la víctima y que por eso denunció a cuatro magistrados del Ministerio Público.

“Mal haría la Comisión de Ética en abrirme investigación por un hecho que ocurrió antes de que asuma el cargo de legislador”, mencionó, ahora sí, con cierta preocupación.

“JULCA DEFIENDE A TOLEDO”

Benítez, incluso, comparó la férrea defensa que realiza a favor de Álvarez, con el resguardo de Julca al ex presidente Alejandro Toledo, quien es investigado por el Caso Ecoteva.

“Cuando denunciaron a Toledo, Julca fue a la Comisión de Fiscalización donde lo defendió e intervino: hace lo mismo que yo con Álvarez, pero ahí nadie dice nada, ahí nadie dice que existe una obstaculización ni lo denuncian. Igual sucede con los otros partidos, como el Apra que defiende a Alan García”, refirió.

Benítez aseguró que él tiene el derecho a “opinar a favor del líder de un movimiento (Cuenta Conmigo) que me apoyó para llegar al Congreso”.

Al ser consultado sobre si considera que su actuación ha sido imparcial, el ex abogado de Álvarez evadió la pregunta y solamente respondió: “para ser claro, no he presionado a nadie ni he obstruido ninguna investigación”.

Finalmente, negó que su campaña para llegar al Congreso haya sido financiada por Álvarez. “No recibí ni un sol de parte de él”, acotó. Sin embargo, Benítez no ha presentado hasta la fecha su reporte de gastos a la Oficina Nacional Procesos Electorales (ONPE).

LA DENUNCIA DE JULCA

Según denunció el congresista de Perú Posible Modesto Julca, Benítez ha violado el Código de Ética del Congreso al no ser imparcial y tratar de evitar que se investiguen los presuntos actos de corrupción en Áncash.

Recordó las veces en que el legislador de Solidaridad Nacional ha presentado reconsideraciones para que el pleno del Congreso no le dé facultades especiales a la Comisión de Fiscalización y la oportunidad en que a último momento invitó a declarar a Álvarez al grupo investigador, cuando ya se tenía un informe final listo. Este documento, tras la defensa de la autoridad regional, fue enviado al archivo.