“He instruido a los sectores correspondientes para que en materia ambiental y social se actualicen las reglas que establecen obligaciones ambientales para la minería, estas reglas deben adecuarse a las exigencias de los tiempos actuales”, manifestó en su mensaje a la Nación emitido desde Palacio de Gobierno.

Según explicó, en el marco de estas nuevas exigencias, se fortalecerá la fiscalización ambiental a todas las operaciones mineras, para que los ciudadanos confíen en que el Estado es capaz de sancionar las malas conductas ambientales e incentivar las buenas prácticas.

Asimismo, dijo que ha dispuesto el fortalecimiento de las herramientas que eviten y mitiguen el impacto de los proyectos mineros, tomando en cuenta a todos los actores, en un marco de respeto a la diversidad cultural.

Mencionó que también deberá garantizarse el acceso al agua como política de estado prioritaria, además de establecerse mecanismos de compensación  que garanticen la reposición de los espacios o recursos inevitablemente afectados por el desarrollo de la minería.

El jefe del Estado también informó que se ha dispuesto la articulación de la minería con planes productivos sobre recursos renovables a fin de facilitar las actividades agropecuarias forestales, de servicios, u otras, dándole más alternativas económicas a los pobladores.

“El Estado tiene papel fundamental para garantizar una nueva forma de hacer minería en el Perú bajo nuevas reglas, una minería amigable con el entorno, que respete condiciones ambientales que los peruanos exigimos y  nos merecemos y que sea capaz de generar inclusión y aporte al desarrollo real (…) tenemos la oportunidad de marcar un antes y un después en la forma de hacer minería en el Perú, en eso estamos trabajando y lo haremos con mayor intensidad”, puntualizó.

Según dijo, el proyecto Conga –que generó rechazo en un sector de organizaciones sociales de Cajamarca, deberá someterse a las nuevas condiciones que el Estado dispone en beneficio de todo el país, especialmente para la población de Cajamarca.

“Este gobierno no aceptará actitudes de soberbia de ninguna empresa”, aseguró.