Chimbote en Línea (Locales).- Desde tempranas horas de la mañana centenares de personas, entre niños, jóvenes y adultos, acudieron al cementerio Divino Maestro de Chimbote, para visitar las tumbas de sus seres queridos y elevar oraciones en el Día de Todos los Santos.

Decenas de comerciantes se apostaron en los exteriores del camposanto para ofrecer comidas, velas, flores, dulces,  globos, adornos para las tumbas, hasta bebidas alcohólicas, convirtiendo el lugar en una tradicional feria, donde estas personas del negocio, buscan sacarle provecho al día vendiendo el ramo de flores hasta en 15 nuevos soles.

Esta tradicional celebración que congrega a muchas personas, sirve para que los hijos, hermanos, padres, madres, viudas, viudos, nietos y demás familiares no se olviden de los de los seres queridos que tuvieron que partir y es que muchos optan silenciosamente a través de sus lápidas elevar una oración, mientras otros a ritmo de las bandas musicales, prefieren recordarlos con alegría y agrado.

Un grupo de personas que llegaron desde diferentes lugares, se apostaron en el Calvario o Cruz Mayor para dejar su ramo de flores para sus familiares que están enterrados en diferentes partes del mundo y en otros casos porque los nichos se encuentran inubicables.

Una algarabía total, para rendir tributo a los seres que un día tuvieron que dejar esta vida terrenal, tal como nos cuenta con lágrimas en los ojos la señora Mery Arias, quien desde hace 4 años visita casi todas las semanas la tumba de su madre.

Dato: El cementerio Divino Maestro de Chimbote se creó en el año 1956 y cuenta con 50 pabellones, además de un área de tumbas y mausoleos. Úrsula Llanca Morales es la difunta más antigua del recinto, cuya tumba data del 16 de julio del mismo año.
(Texto y fotos Milton Palpa)