Obispo de Chimbote: iCómo se agranda la figura de Benedicto XVI!

Chimbote en Línea (Cuestión de fe) Hace unos días comenzaron en Roma las Congregaciones Generales de los Cardenales de la Santa Madre Iglesia. Dichas Congregaciones, no son otra cosa, que reuniones a puerta cerrada, de todos aquellos que tienen la responsabilidad de elegir al nuevo Pontífice. Dos serán los temas que ocupen a los Cardenales: la situación real de la Iglesia a nivel universal y el perfil del Santo Padre que ésta necesita en el contexto actual.

 

Después de haber conocido y amado con todo el corazón a Benedicto XVI y teniendo en cuenta el calado de su Magisterio Pontificio, no será fácil encontrar un Sucesor de su talla humana e intelectual.

Sin embargo, la nave de la Iglesia es de Jesucristo y el timonel que la guía es el Espíritu Santo. No nos quepa la menor duda, que muy pronto y probablemente antes de la Fiesta de San José Patrono de la Iglesia Universal, todos estaremos felices, porque ya conoceremos al nuevo Papa.

El Cónclave no será largo. Todos los Cardenales están ya en Roma y la mayor, parte, tiene ya en su mente el nombre del candidato a ser Vicario de Cristo.

Desde que el Papa Benedicto XVI anunció que se retiraba, porque le faltaban las fuerzas para seguir al frente de la Iglesia, en todo el mundo ha comenzado a valorarse su valentía, su generosidad, su libertad, pero sobre todo su gran humildad. Desde el silencio, seguirá en comunicación con el mundo a través de sus escritos. Su actividad fundamental será orar por la Iglesia y por el nuevo Pontífice, al que le ha prometido obediencia sin fisuras en las palabras de despedida.

 iCómo se agranda la figura de Benedicto XVI y cómo se hace cercano a cada uno de nosotros por su fragilidad, por su ternura, pero sobre todo por su sencillez y humildad, que lo convierten en un gigante!.

No me extrañaría que con el paso del tiempo, la Iglesia lo valore aún más, porque siempre ha buscado y defendido la verdad y porque en un mundo fisurado por la corrupción y la intriga, se mantuvo como el siervo del Evangelio, fiel y prudente, al que Jesús le dirá: entra en el gozo de tu Señor.

 Los hijos de la Iglesia experimentamos en estos días la nostalgia de su presencia, pero al mismo tiempo, nos sentimos también alegres, ya que al final, el bien, la verdad y la honestidad abrieron un boquete en el muro de la indiferencia de los hombres y mujeres del siglo XXI. (Por: Monseñor Ángel Francisco Simón Piorno - Obispo de Chimbote)