Chimbote en Línea (Policiales).- Los vecinos de la primera cuadra del jirón Ancash en el pueblo joven Miramar Bajo fueron testigos de un horrendo crimen. Tres delincuentes provistos de armas de fuego persiguieron a un sujeto para matarlo.

Lo siguieron más de 250 metros para asesinarlo de siete balazos en la cabeza. Su cuerpo sin vida estuvo tirado hasta las 10 a.m. porque no llegaba el fiscal de turno ni el médico legista.

Efectivos policiales encontraron varios proyectiles de armas de fuego calibre 9 milímetros regados en el pavimento.

“Escuchamos gritos de una persona pidiendo auxilio, pero no salimos de nuestras casas porque los delincuentes empezaron a efectuar disparos. Sabíamos que habían matado a alguien por eso llamamos a la policía que después encontró el cuerpo sin vida de un joven”, contó el morador Juan Peláez Sotomayor.

Con presencia del médico legista Rubén Arroyo Urresti se dispuso el levantamiento del cadáver para su traslado a la morgue central para la necropsia de ley.

Asimismo, los efectivos de la Policía Criminalística recogieron todas las evidencias de este hecho de sangre.

Hasta las 6 de la tarde todavía no había sido identificada la persona asesinada, lo único que se conoció fue que la víctima tenía tatuado en su antebrazo derecho el nombre de Alexis.

Operativo integrado

El jefe de la Oficina de Seguridad Ciudadana de la Municipalidad Provincial del Santa, Nicolás Leguía Arias, anunció que debido a los hechos de violencia ocurridos en Chimbote repotenciarán este semana los operativos integrados con la policía. (Texto y foto Lindberg Cruzado)