Chimbote en Línea (Locales).- Esta mañana la Fiscalía de Prevención del Delito realizó una inspección inopinada a la Casa de la Juventud de Chimbote, institución en la que al parecer encontraron serias deficiencias como un servicio adecuado y  su infraestructura no reunía las condiciones para rehabilitar a 32 internos, en su mayoría en tratamiento por adicción a las drogas.

La fiscal de Prevención del Delito, Paola Valdivia Sánchez, se reunió con estas personas brindándoles  su apoyo moral, sin embargo al salir de la institución escuchó los gritos de uno de los pacientes, Jorge Luis Garay Mestanza (50), quien con voz afónica denunciaba que había sido secuestrado y que lo estaban maltratando física y sicológicamente, tras negarse a recibir tratamiento.

El sujeto atrincherado en una de las ventanas, exigía a la autoridad que lo libere ya que había sido internado a la fuerza en este centro de rehabilitación.

A este reclamo se sumó la de un joven sordomudo, Aldo Gutiérrez Velázquez (21), quien con gestos y señas contó a la fiscal que había recibido maltrato de parte de los encargados de esta institución, quienes lo mantenían encerrado en otro de los ambientes, incluso había sido cubierto con sabanas para pasar desapercibido en la inspección.

Tras recibir la manifestación de ambos sujetos la fiscal advirtió que los casos serán investigados y de comprobarse esta irregularidad, denunciaría penalmente a los responsables, por atentar contra la vida y salud de estas personas.

Cabe recordar que meses atrás 5 internos se escaparon de esta institución y luego denunciaron haber recibido maltrato físico y mala atención en su recuperación.
(Texto y fotos Milton Palpa)

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