Chimbote en Línea.- Tras sostener una reunión, los integrantes de la Asociación de Alcaldes de la Provincia del Santa acordaron solicitar al Gobierno Central la declaratoria de estado de emergencia de la región Áncash, esto tras el execrable crimen del alcalde de Samanco, Francisco Ariza y su asesor legal, Henry Aldea Correa.

Los burgomaestres de la provincia de Santa y de los distritos de Moro, Nepeña, Jimbe, Nuevo Chimbote y Santa dijeron sentirse preocupados con lo ocurrido por lo que emitirán un pronunciamiento ante el presidente de la República Ollanta Humala, al Congreso, a la Presidencia del Consejo de Ministros y el Ministerio del Interior, a fin de que atiendan este pedido.

El alcalde de la provincia del Santa, Julio Cortez Rojas pidió una exhaustiva investigación a los órganos correspondientes sobre este crimen al que consideró como un “acto terrorista”, cuantas personas y autoridades más tienen que morir para que el gobierno se fije en lo que ocurre en Áncash, donde los actos delincuenciales han sobrepasado los límites”, expresó.

El burgomaestre cuestionó el papel de la Policía Nacional, asimismo dijo que el Ministerio Público solo se ha dedicado a perseguir autoridades, antes que a los delincuentes que de inmediato son liberados por el Poder Judicial.

“Es una pena como ha terminado el alcalde de Samanco, quien hace poco denunció haber recibido amenazas de muerte, pero que no fueron atendidos por la policía; en ese sentido pido al jefe de la División Policial (Juan Meyer) que ponga su cargo a disposición. Este asesinato pudo haberse evitado”, apuntó.

Al respecto el alcalde de Nuevo Chimbote, Valentín Fernández Bazán, lamentó lo ocurrido y a la vez dijo que es conveniente que las fuerzas armadas patrullen las calles para que ya no ocurran más muertes en la región.

Tras la conferencia de prensa, las autoridades salieron del palacio edil con dirección al distrito de Samanco, donde se velan los restos de Francisco Ariza.

(Por Milton Palpa)