Chimbote en Línea.  – El Gobierno salió a defender su polémico proyecto de una Policía del Orden y la Seguridad, anunciado por la presidenta Dina Boluarte en su mensaje de 28 de julio: la creación de un tercer nivel de policías para patrullaje de calles y control del orden. El premier Alberto Otárola y el titular del Interior, Vicente Romero, aducen que beneficiará a la población, pero especialistas advierten peligros por buscar efectivos con baja capacitación y precariedad laboral.

“Hay un déficit de más de 40.000 efectivos en el país. Y hay otra realidad: los jóvenes no se están alistando (en la Policía) con la rapidez deseable (…). Y se ha diseñado un proceso de captación rápida de jóvenes, especialmente aquellos que han hecho el servicio militar voluntario (…). La idea es tener una policía preparada que se desplace a los lugares que tienen déficit”, dijo Otárola en RPP.

Mientras que Romero en Radio Exitosa negó que capacitar exintegrantes del servicio militar por seis meses y un contrato de tres años en la Policía renovable implique un proceso exprés. Empero, adelantó que, si se aprueba la ley, este mismo mes lanzará la convocatoria.

Dijo que de ser así “deben estar incorporándose a más tardar antes de enero, porque nos da el tiempo para poder mejorar las infraestructuras de las escuelas”.

Sin embargo, diversos especialistas cuestionan el proyecto.

“Están creando un sereno con armas que depende del sector Interior y de la Policía Nacional del Perú. Al tener armas ya se desvirtúa su carácter preventivo porque van a poder ser agentes de persecución. Estarán en patrulleros, usarán motos, perseguirán a los delincuentes y podrán matar si es necesario de acuerdo a normas que aprenderían en seis meses”, dijo Ricardo Valdés, exviceministro del Seguridad Pública, en el programa ‘Sálvese quien pueda’.

“Es una improvisación de personas que intentan experimentar con la PNP y sus funciones, un proyecto de ley populista, pero nada serio y técnico como se requiere para luchar contra la inseguridad ciudadana”, refirió el abogado Stefano Miranda, especialista en derecho policial.

“Contraviene la Constitución y el decreto que regula la carrera policial. Para patrullar en las calles, se necesita personal policial preparado para tipificar preliminarmente el delito, no cometer corrupción y abuso de autoridad. Es delicado tener policías que no sean de la carrera policial: no podríamos controlar actos de corrupción e inconductas en ellos, añadió.

“Es un proyecto engañoso. Dice que su fin es fortalecer la prevención, pero se piensa en asistentes policiales con formación mucho más breve y que apoyen el trabajo de la policía, que es principalmente represivo y de control del delito y en segundo grado preventivo. Es una manera para que la policía tenga más personas que la apoyen en desmedro de la calidad y profesionalización”, sostuvo el abogado César Bazán, especialista en seguridad.

Advirtió que “se les autoriza usar la fuerza contra ciudadanos” y “si tienen poco entrenamiento y formación militar en algunos casos, es peligroso. “Si les dan armas letales, corre peligro la vida de las personas y si les dan armas menos letales, también hay riesgo”, anota el especialista.

A favor

En otra orilla hay quienes respaldan el proyecto de ley.

“No hay policías suficientes para hacer un trabajo de prevención y me parece una buena idea este proyecto de ley de crear una categoría de orden y seguridad. Este personal va a ser reincorporado a la policía temporalmente, tres años que pueden ser seis. Es un proyecto que tiene que ser debatido”, adujo el general en retiro Carlos Morán, exministro del Interior, en RPP.

El también exministro del Interior Rubén Vargas consideró positiva la idea de “una policía básica, como ha existido en otros países”. Sin embargo, alertó que esa buena idea corre riesgo de naufragar si no se atiende adecuadamente la capacitación y precariedad laboral.

“Si no se toma especial cuidado en la selección de jóvenes, se va a fracasar. También se va a fracasar si no se invierte la actual situación precaria en los policías. Entregar el uniforme de la policía y un arma de fuego a policía no adecuadamente formada estaría creando una bomba de tiempo”, comentó.

Reacciones

Carlos Morán, exministro del Interior

“No hay policías suficientes para la prevención, y es buena idea crear una categoría de orden y seguridad. Este personal será reincorporado a la policía temporalmente, tres años que pueden ser seis”.

Rubén Vargas, exministro del Interior

“Es buena idea con experiencia positiva, pero si no se toma especial cuidado en la selección de jóvenes, se va a fracasar. También fracasará si no se invierte la situación precaria en los policías”.

Ricardo Valdés, exviceministro del Interior

“Están creando un sereno con armas que depende del sector Interior y de la Policía. Estarán en patrulleros, usarán motos, perseguirán a los delincuentes y hasta podrán matar si es necesario”.

Stefano Miranda, abogado en derecho policial

“Es una improvisación de personas que intentan experimentar con la PNP y sus funciones, un proyecto populista, pero nada técnico, como se requiere para luchar contra la inseguridad ciudadana”. (Fuente: La República)