Chimbote en Línea (Nuevo Chimbote).-Los vecinos del pueblo joven PPAO en Nuevo Chimbote están consternados por la trágica muerte de tres jóvenes: Colber Rodríguez Tejada de 29 años, Marco Antonio Rodríguez Coronel de 28 y Edison Jainor Arbildo Rodríguez de 21.
Estos tres muchachos murieron ahogados al caer el vehículo en el que se desplazaban al canal de irrigación Carlos Leight del proyecto especial Chinecas, en la zona conocida como Compuerta de Palos en el centro poblado de Tangay Alto, a 50 minutos de la ciudad de Chimbote.
Edwin Saldaña Rojas de 31 años, uno de los sobrevivientes, contó que ayer miércoles regresaban del caserío de Monte Sarumo, después de una tarde campo, cuando de pronto a las 7.20 de la noche aparecieron en la carretera dos delincuentes provistos de revólveres que apuntaban su vehículo.
“Al ver a los facinerosos en la carretera, Colber que iba conduciendo el automóvil quiso retroceder, pero en una mala maniobra cayó el vehículo al canal de irrigación. Hice los esfuerzos por salvarme, gracias a Dios pude salid del carro, he vuelto a vivir”, contó con lágrimas.
Este muchacho que dice ser mototaxista mencionó que al salir de la unidad vio que Freddy Rolan Rodríguez Tejada, uno de sus amigos, también había sobrevivido. “Con los pobladores de la zona rescatamos a los compañeros, pero lamentablemente ya habían fallecido”, agregó entristecido.
Según Edwin Saldaña, Colber Rodríguez trabajaba como chofer de la empresa de colectivos Las Palmeras, Marco Rodríguez era estudiante universitario y Edison Arbildo laboraba como mototaxista.
“Siempre acostumbrábamos ir al campo, nos acomedíamos a realizar rastrojos para que nos vendan frutas a menos costos. Lo hacíamos para relajarnos, como para escapar de la rutina, lamentablemente murieron tres grandes amigos y pudimos haber fallecido los cinco”, mencionó.
Reclaman seguridad
Los vecinos de los anexos de Pampa Dura y Santa Clemencia reclamaron mayor presencia policial en sus zonas. Denunciaron que a la semana se registran hasta tres asaltos a mano armada a vehículos.
“Nuestros pueblos parecen ciudades fantasmas, a partir de las 6 de la tarde ya nadie puede salir de sus casas porque nos asaltan, no hay seguridad, la presencia de la policía es nula, hasta cuándo vamos a seguir viviendo en medio de tanta delincuencia”, declaró el agente municipal de Santa Clemencia, Yuri Sandoval.(por Lindberg Cruzado)