Chimbote en Línea (Periodismo escolar) Hoy en día las mujeres son víctimas de acoso sexual por causa del impulso de la mayoría de los varones. Algunos de ellos suelen ser demasiados exagerados y tienden a propasarse llegando al extremo del abuso sexual.
El acoso sexual es una forma de discriminación por razón de género, si bien los hombres pueden ser también objeto de acoso sexual, la realidad es que la mayoría de víctimas son mujeres.
Tanto la OIT como la CEDAW identifican el acoso sexual como una manifestación de la discriminación de género y como una forma específica de violencia contra las mujeres
Según la Convención para la eliminación de todas las formas de discriminación contra las Mujeres (CEDAW) define el acoso sexual como el “Comportamiento de tono sexual (contactos físicos e insinuaciones, etc.). Este tipo de conducta puede ser humillante y puede constituir un problema de salud y de seguridad; es discriminatoria cuando la mujer tiene motivos suficientes para creer que su negativa podría causarle problemas en el trabajo, en la contratación o el ascenso inclusive, o cuando crea un medio de trabajo hostil”.
En una entrevista a Olga Fotinopoulou, profesora de Derecho en la UPV-EHU, realizada por el periódico el comercio (2013) nos dice que "la gente tiene la percepción de que hay menos casos de los que realmente existen", para sustentar lo manifestado aporta un dato revelador: "En más del 90% de los casos en los que se da este tipo de acoso, las víctimas son mujeres".
Muchas veces las mujeres son tocadas en lugares públicos, ya sea en los metros, discotecas, en la calles, en tiendas, etc., ya que algunos varones no respetan ni controlan sus impulsos sexuales.
Los casos más frecuentes y menos denunciados se dan en el plano laboral, muchas de las víctimas no tienen temor y minimizan este hecho porque quieren evitar ser despedidas. Las que realmente lo han hecho alzando su voz de protesta han sido despedidas manifestando ".... me echaron de mi trabajo por defender mis derechos como mujer"
Es triste que algunas figuras públicas o que representen autoridad, como es el caso del Cardenal Cipriani, que el año pasado fue duramente criticado por su frase “La mujer se pone, como en un escaparate, provocando”.
Es triste que piense que las mujeres son las que provocan a los varones cuando no es así ya que la mujer al igual que el varón es libre de vestirse como ella desee sin temor a ser manoseada.
Para algunos varones solo es un silbido o solo un pequeño halago pero para una mujer que se hace respetar es como violar su espacio de privacidad.
Por este y muchos otros factores debemos de tomar conciencia e incluso ponernos en lugar de la persona para así poder parar este problema social.
Luchemos por una sociedad donde la mujer sienta la misma libertad y seguridad que sentimos los varones cuando caminamos por las calles.
Alumno: Fabricio Paul Chauca Chapoñán
Grado y sección: 4o “A”
Colegio: Víctor Andrés Belaunde
Asesora: Shirley Paredes Barranzuela
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