
Chimbote en Línea.- Elvis Junior Reyes Flores, conocido artísticamente como “Checho”, acababa de participar en una reunión por el cumpleaños de un amigo, el sábado 7 de octubre. Lo que nadie imaginaba era que sería la última vez que lo verían con vida. Minutos después de salir del lugar, fue interceptado por un sujeto que, sin mediar palabra, le disparó ocho veces por la espalda. El crimen estremeció a toda la ciudad.
“Checho” era más que un cantante local. Su voz, su presencia y su carisma formaban parte del alma cultural de Huarmey. Desde niño demostró talento, y durante más de tres décadas lo cultivó hasta convertirse en un artista completo, capaz de dominar diversos géneros y llenar de vida cualquier escenario. Su historia, sin embargo, tuvo un desenlace trágico que hoy es investigado como un posible caso de extorsión criminal.
El sábado 7 de octubre, Junior asistió a una fiesta de cumpleaños en una vivienda del distrito. Durante la velada cantó, compartió con los asistentes y disfrutó como lo hacía siempre. Pero al retirarse, fue seguido por un sujeto que lo interceptó en el exterior y le disparó ocho veces por la espalda.
Cámaras de seguridad captaron al presunto asesino. Vestía una casaca negra y llevaba un canguro en la cintura. Testigos aseguran que no hubo discusión previa, lo que refuerza la hipótesis de un ataque premeditado.
Mientras sus familiares y personas cercanas afirman que el artista habría estado siendo amenazado. Algunas versiones indican que su creciente popularidad lo habría convertido en blanco de extorsionadores que operan en la zona. La Policía no descarta esta línea de investigación y busca establecer si existió una solicitud económica previa al atentado.
La familia sospecha que el atacante conocía a la víctima, ya que no mostró resistencia ni intentó escapar. Esa cercanía habría sido utilizada para ejecutar el crimen con frialdad.
Por su parte, la Policía ha analizado las imágenes captadas por cámaras de seguridad. En ellas se distingue al principal sospechoso antes y después del ataque. Testigos han colaborado con declaraciones, y se espera que pronto se emita una orden de captura formal.
El caso está en manos de la Fiscalía, que investiga bajo la figura de homicidio calificado. La línea de extorsión es una de las principales hipótesis. Mientras tanto, la familia y la comunidad siguen exigiendo justicia. (Fuente: América TV)
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