Chimbote en Línea.- Contrariamente a lo que pregonaba en su discurso como candidato, el hoy gobernador regional de Áncash, Waldo Ríos Salcedo,  dejó en claro -tal como lo hizo ayer en Huaraz- que para cumplir con su promesa de los 500 nuevos soles requerirá de una modificatoria de la Ley del canon minero.

Además aclaró a la población chimbotana que no todas las familias recibirán el monto que prometió en su campaña electoral, sino que este beneficio será para las familias más pobres y previa contraprestación de servicios.

Asimismo ratificó también lo dicho ayer en su segunda juramentación, respecto a que mediante una ordenanza regional prohibirá que los pobladores porten armas de fuego, con la finalidad de disminuir la delincuencia y que Áncash sea "un ejemplo de región segura".

Respecto a las obras paralizadas señaló que aún no se prodrán reanudar debido a que recién está asumiendo la gobernación de Áncash y que todavía debe realizar un diagnóstico de la situación.

También reiteró la difícil situación en que se encuentra la región debido al forado de 500 millones de soles que tiene Áncash.

Ríos Salcedo no pasó por alto esta oportunidad y en esta su tercera juramentación volvió a agradecer a sus "ilustres ciudadanos" que lo ayudaron a pagar la deuda al Estado Peruano y que -según él- fueron "injustamente vilipediados".

También se arrodilló y besó el suelo chimbotano como muestra de su agradecimiento.

Momentos después se procedió al acto simbólico de imposición de la banda y del distintivo de gobernador regional de Áncash de manos del padre Juan Roger Rodríguez. (Redacción central-Lindberg Cruzado)

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