Chimbote en Línea (Locales).- Los familiares y amigos del estibador Miguel Marchena Aguirre, quien murió atropellado por un ómnibus interprovincial de la empresa Turismo Paraíso, denunciaron públicamente que el SOAT del vehículo no se encuentra vigente, lo que impide que la empresa aseguradora se haga cargo de los gastos.

Con pancartas en manos, los protestantes llegaron hasta las oficinas de la referida empresa para exigir a los propietarios cumplir con su obligación, ya que los familiares que son de condición humilde hicieron préstamos para brindarle cristiana sepultura.

Entre lágrimas la hermana del occiso, Rosa Marchena Aguirre, contó que para salir del impase la empresa le entregó 300 soles y le hizo firmar un documento responsabilizándola de los gastos de sepelio, dinero que luego iba ser reembolsado, pero no sucedió.

“Si hoy fue mi hermano, mañana les puede pasar lo mismo a tanta gente que viajan en esta empresa, tan solo por no contar con SOAT. Sólo quiero que se hagan responsable, porque el deja a 3 hijos en la orfandad. He sacado préstamo y empeñe mis cosas para salir del apuro y ahora los dueños de la agencia se hacen a un lado”, expresó llorando.

La afligida mujer dijo que su hermano se dedicaba a estibar sacos de harina de pescado y habría cruzado la avenida Pardo para dirigirse a su casa, asimismo cuestionó que el ómnibus que habría atropellado a su hermano tuvo la negligencia de transitar por esa ruta que no le correspondía.

Lamentaron que a la fecha nadie se hecho responsable de la muerte de Miguel Marchena, conocido en su barrio del pueblo joven San Juan como “Loco Pescao”.

Cabe recordar que esta tragedia ocurrió el pasado 3 de diciembre en la cuadra 38 de la avenida José Pardo cuando el ómnibus de placa B6L:960, transitaba de norte a sur.

(Texto y foto  Milton Palpa)