Chimbote en Línea.- Para el diario perú.21 estas coincidencias que giran en torno al caso del pedido de asilo político de Martín Belaúnde Lossio en Bolivia, serían muy extrañas. Además de las formalidades del pedido de refugio de Martín Belaunde Lossio a Bolivia, han surgido elementos que echarían una sombra de dudas a la posición oficial del Ejecutivo, que niega proteger al fugitivo.

Seis días antes que el prófugo Martín Belaunde Lossio presentara su solicitud de refugio ante la Comisión Nacional de Refugiados de la Cancillería de Bolivia (Conare), el presidente Ollanta Humala y el mandatario altiplánico, Evo Morales, se reunieron en privado en Palacio de Gobierno de Lima durante unas dos horas.

En efecto, Ollanta Humala recibió a Evo Morales el martes 9 de diciembre pasado y el encuentro se desarrolló en la sala Cáceres de la sede gubernamental, el cual está registrado en la agenda presidencial oficial.

Al final de la cita no hubo una declaración conjunta de ambos mandatarios sobre aquella reunión.
Y la semana siguiente, el lunes 15 del mismo mes, Martín Belaunde Lossio –ex asesor de campaña electoral de Ollanta Humala– acudió en persona hasta la Conare, en La Paz, con el fin de iniciar el trámite para obtener la condición de refugiado. Esto fue confirmado por el propio titular de esa entidad boliviana, César Siles, al diario El Comercio.

Cabe anotar que el miércoles último, el presidente boliviano trató de desmentir la presencia de Martín Belaunde Lossio en la nación sureña al afirmar que este no había iniciado ninguna gestión de pedido de asilo político.

Solo me informé por los medios de comunicación que un (ex) asesor del presidente Ollanta Humala estaría pidiendo asilo (en Bolivia). No tengo información, estuve reunido con el canciller (David Choquehuanca). Cualquier pedido tiene que pasar por la Cancillería. Hasta este momento, solo es una información periodística”, dijo Evo Morales anteayer en conferencia de prensa.
Precisamente, al reciente encuentro con Ollanta Humala en la Lima, Evo Morales llegó acompañado de David Choquehuanca.
Y bajo el mandato de este ministro boliviano se encuentra, además, la Conare, dependencia del Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia, ante la cual se presentó el fugitivo Martín Belaunde Lossio.
PERIPLOS AL ALTIPLANO
Martín Belaunde Lossio registra al menos 3 ingresos a suelo boliviano, según información oficial de Migraciones al que Perú21 tuvo acceso.
Esos viajes se realizaron entre los años 2007 y 2010, después de que Martín Belaunde Lossio asesorara a Ollanta Humala en su campaña presidencial del 2006.

La primera travesía a Bolivia del empresario fue del martes 27 al jueves 29 de marzo del 2007; la segunda se efectuó desde el viernes 8 hasta el lunes 11 de mayo del 2009; y la última, del martes 29 de diciembre del 2009 al sábado 2 de enero del 2010.
Como se recuerda, en ese mismo periodo, Martín Belaunde Lossio y su padre, Arturo Belaunde Guzmán, habían abonado a Nadine Heredia, ahora primera dama, por lo menos US$100 mil bajo el supuesto concepto de pago de consultorías para una empresa de tratamiento capilar y una compañía de aceite de palma.

NO CALIFICA
En tanto, el ex procurador anticorrupción Ronald Gamarra indicó que, a pesar de que la norma boliviana puede inclinarse a favor de la persona que busca la condición de refugiado, esta no se aplicaría en el caso de Martín Belaunde Lossio.

“Lo cierto es que los tratados internacionales establecen que solo es refugiado quien es perseguido en razón de cuestiones políticas, ideológicas, raciales o de nacionalidad. Cosa que no sucede en el caso de Belaunde Lossio. Por tanto, técnicamente, según la legislación boliviana, este no califica para ser refugiado”, opinó a Perú21.

Añadió que “hay una disposición expresa en la ley y en el reglamento boliviano, en el sentido que resulta improcedente la condición de refugiado para aquellos que han cometido un delito común en su país de origen, que es la situación de Martín Belaunde Lossio, que está siendo procesado en estos momentos por un tema de corrupción”.

Aseveró que el fugitivo no es un perseguido político. “A él lo buscan por haber cometido presuntos delitos”, anotó Gamarra.(Perú.21)