Chimbote en Línea.- Aplicar bloqueadores a los bebés menores de un año y exponerlos al sol puede ser muy peligroso para su piel debido a que no está preparada para ello, por lo que su uso, sumado a la exposición a los rayos solares podría causarle daños irreversibles, advirtió el director de la Red de Salud Pacífico Norte.

“Los bebés menores de un año son más propensos a absorber los rayos ultravioleta -que tienen un efecto acumulativo- por lo tanto, podrían causarles daños irreversibles, más aún en este verano en el que los niveles de radiación se están elevando considerablemente y por encima de lo tolerable por nuestro organismo”, señaló Jhony Cano Suárez, director de la Red.

Cano Suárez detalló que el uso de bloqueares en bebés menores de un año puede generar toxicidad si son absorbidos por su piel.

“A ello se suma que la exposición de los infantes a los rayos solares –creyendo equivocadamente que los bloqueadores aplicados los protegerán– podría causarles quemaduras, lesiones y erupciones cutáneas, entre otros daños”, enfatizó.

Por esa razón, recomendó a los padres de familia no exponer a los bebés al sol de manera directa, vestirlos con polos y pantalones largos de colores claros, fabricados con materiales frescos como el algodón, ponerles gorras o sombreros con alas anchas y caminar o permanecer bajo la sombra.

“No debemos confiarnos a la protección que les puede dar una sombrilla pues la piel de los bebés podría sufrir algún daño ya que es extremadamente sensible debido a que todavía no ha madurado por completo”, sostuvo.

Asimismo, los especialistas de la Unidad de Salud Ambiental (USA) recomendaron a los padres de familia llevar a sus bebés a la playa y por periodos cortos de tiempo, cuando hayan cumplido un año de vida, siguiendo las recomendaciones señaladas y utilizando un bloqueador apropiado para su edad.

El Jefe de USA, Eder Montesinos Cabanillas, dijo que “para proteger la piel de los pequeños de 1 año de edad se debe aplicar bloqueadores elaborados especialmente para bebés, con un factor de protección superior a 30, apropiados para piel sensible y resistentes al agua cada dos horas en las áreas de su cuerpo que serán expuestas al sol”.

“Además, se debe evitar exponer a los bebés exageradamente al sol porque no tienen necesidad de broncearse, hidratarlos con agua en cantidades suficientes (no gaseosas ni bebidas rehidratantes) y mojarlos cada cierto tiempo para que soporten el calor”, concluyó.