Chimbote en Línea.-(Periodismo escolar) ¿Cómo ser indiferente a esta espera? ¿Cómo no tener miedo? ¿Cómo permanecer tranquilo y dormir relajado por las noches? ¿Cómo no sentir que estamos a puertas de dejar un ciclo de nuestra vida para empezar otra, llena de más desafíos y problemas que la anterior? Ofrecer una respuesta a estas interrogantes, resulta complicado.
Terminar la etapa escolar es más que simplemente dejar atrás amigos, buenos amigos, y conocer un ambiente distinto al de nuestra Institución, aquella que nos albergó por largos años en sus aulas.
Es más que dejar atrás maestros que, sin duda alguna, se ganaron un poco de nuestro corazón. Es mucho más que dejar atrás tareas, presentadas a destiempo en algunas ocasiones.
Iniciar una nueva vida no es fácil, nuevos problemas que enfrentar, obstáculos que superar y temores que dejar. Eso es lo bonito de empezar una vez más. Hay tanto que alcanzar y a la vez, mucho que dejar atrás. Acepto el desafío.
Es difícil, sí lo sé, nadie puede afirmar lo contrario y es que quienes egresaron, comentan entre bromas y risas, que la secundaria fue la etapa de su vida que quisieran haberla aprovechado mejor.
Esta reflexión nos motiva a hacernos la siguiente pregunta ¿estamos optimizando lo que nos queda de este último año? La respuesta la tiene cada uno y también puede decidir hacer el cambio ahora, que aún es tiempo.
Estudiante : Michael Daniel Orbegoso Gonzales
Grado : 5° “A”
I.E. : “R.F.S. de Yugoslavia”
Asesora : Carmen Gonzales Martínez
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